Inanna
Inanna es como hija de Nanna Suen, dios de la luna, la diosa de los cielos, representada por el planeta Venus. También de la belleza, del amor, de la fertilidad; y finalmente de la guerra. Posteriormente los acadios asimilaron a su diosa Ishtar.
En su mito se narra su descenso a los infiernos donde se cuenta que, a medida iba descendiendo, fue deshaciéndose progresivamente de cada parte de su vestido hasta quedarse completamente desnuda frente a su hermana Ereshkigal, la reina del mundo subterraneo, donde exaló su último suspiro y su piel seca se colgó de un gancho.
A partir de entonces la tierra dejó de producir por lo que el dios Enki envió dos espíritus con un recipiente con el agua de la vida, que al derramarla sobre su piel seca, la devolvió a la vida. Ereshkigal exigió que otro muerto ocupara su lugar, por lo que Inanna al llegar a la superficie envió a su hermano y amante, pero infiel, el pastor Dumuzi para que la sustituyera. A partir de entonces la naturaleza volvió a ser fecunda.
A su marido se le nombra, en algunos textos, con el título de Ushumgal-anna, es decir "gran dragón de la reina de los cielos". Posiblemente nuestra constelación de Draco.
En otro relato se narra el enamoramiento de Inanna con Gilgamesh, que había matado a su dragón Hubawa, y el rechazo de éste, reprochandole el trato que tenía con sus amantes como Dumuzi, a los que después de conseguir su placer los mata.