Crear el Cielo

En todos los mitos aparece un dios que se encarga de crear el cielo y los astros tal como aparecen en el día y en la noche. Es decir que es el dios que desde un caos original es capaz de crear las estructuras ordenadas que regirán sin descanso el día y la noche, los ciclos de la luna, la aparición del sol en el horizonte y las estaciones del año. 

Así como la creación del mundo explica el entorno del hombre en su espacio vital, la creación del cielo es precisamente la explicación del tiempo y de sus ciclos. 

La materia prima a partir de la cual se crea el cielo difiere en cada mito aunque está siempre relacionada con el agua. En los mitos hebreos, Yahvé constituye el cielo con las aguas superiores que había derramado un dragón marino; mientras que en los mitos babilonios, Marduk los crea a partir de una parte del cadaver del dragón de las aguas del mar, que acaba de matar. 

Por su parte en los mitos védicos, Indra crea el cielo con las aguas cósmicas liberadas al derrotar al dragón que las guardaba. 

Por esto del cielo caen las aguas, en forma de lluvia, cuando es así propiciado por algún dios. Pero siempre se trata de aguas fecundas ya que provienen de las primitivas aguas de la creación