Tiamat
Según el mito sumerio de creación, en el principio se juntaron las aguas dulces del abismo, las del progenitor Apsu , con las aguas saladas del mar, las de la dragona Tiamat, dando lugar a todas las criaturas y todos los dioses.
Luego los jóvenes dioses se revolvieron contra Apsu y uno de ellos, Enki, lo mató. La gran diosa Tiamat, se enfureció y, para vengarse, organizó un ejército de seres monstruosos, al frente del cual puso a su hijo Kingu.
Ningún dios se atrevía a hacer frente a tamaño ejército, ni siquiera el dios de los cielos Anu. Entonces se presentó ante la asamblea de los dioses, Marduk, el más joven de ellos, ofreciéndose a acabar con Tiamat. Enki apoyó la propuesta y fue elegido para el combate.
Marduk tomó su arco, su red y su maza, y se montó en su carro llamado "tempestad irresistible" yendo a la búsqueda de Tiamat. Cuando la encontró se abalanzó contra ella, ésta abrió su boca para engullirlo, pero él soltó el viento maligno que impidió que cerrara su boca, aprovechando entonces para disparar su flecha dentro de sus entrañas causándole la muerte.
El ejército de monstruos huyó en desbandada y Marduk fue proclamado rey de los dioses.