Naas

Según Justino el Gnóstico, el relato bíblico del paraíso en el Génesis no es más que una alegoría, utilizada por Moisés para mostrar la estructura básica del cosmos. Así el árbol de la vida no es más que Baruch y el árbol de la sabiduría es Naas, ambos hijos de los amores de Elohim y de Edén

Baruch actúa siempre a favor de su padre mientras que Naas lo hace a favor de su madre. Naas es la serpiente que, enroscada en torno a su árbol, hace pecar a Adan y Eva haciéndoles creer que serán tan sabios como Elhoim. 

Y es la que, finalmente con sus insidias, hará que Jesus de Nazaret sea crucificado. 

Esta lucha cósmica entre ambos contendientes finaliza con la victoria de Elhoim.