Dragón de Rodas

La isla de Rodas fue arrebatada por los cruzados al imperio bizantino para constituir allí un importante centro de los Caballeros Hospitalarios de San Juan, con el fin de apoyar a los peregrinos que se dirigían a Tierra Santa. Consta que en 1342 su Gran Maestre prohibió a sus caballeros intentar acabar con un dragón que desde antaño vivía en las marismas de la isla.

Se cuenta que dicho dragón tenía forma de cocodrilo gigante y que haba matado ya numerosos caballeros, que se atrevieron a acercársele  Sin embargo años más tarde, el nuevo Gran Maestre, Dieudoné de Gozón decidió acabar con el dragón. Para lo cual entrenó varios perros Bulldog, con el fin de que le atacasen el vientre y consiguieran inmovilizar el dragón, cosa que así hicieron, pudiendo el caballero acercarse lo suficiente al dragón para poder matarlo con su espada.