Ness

En las leyendas celtas hay diversas versiones de cómo la princesa Ness del Ulster dio a luz a su hijo Conchobar. En una de ellas se dice que el marido de la princesa es Fachtna Fáthach, rey de Irlanda, y ya que ella estaba embarazada le interesada saber cuándo era el momento más oportuno para que naciera su hijo. El druida Cathbad le dijo que si se demoraba al día siguiente coincidiría con el día del nacimiento de Jesucristo y que de esta forma garantizaría que sería un gran rey. Ella se sentó en una piedra junto al río Conchobar y esperó a que amaneciera. Entonces dio a luz con la mala fortuna de que el niño cayó al río pero, Cathbad estaba al lado y lo salvó. Por esta razón le pusieron al niño el nombre del río: Conchabar.

Otra leyenda señala que el druida el día de su nacimiento hizo una profecía sobre su reinado y, en ella, lo llama: "mi hijo y mi nieto". por lo que se sugiere que era fruto de una relación incestuosa de él con su hija Ness.

En otra leyenda se dice que la princesa Ness fue a consultar al druida Cathbad sobre la fecha más adecuada para engendrar a un hijo que llegase a ser un gran rey. Y que el druida viendo que no había nadie más cerca, le dijo que aquel era el mejor momento y la llevó a su lecho donde concibió a su hijo conchabar.

Aún en otra versión, compatible con las dos anteriores se dice que, con el fin de hacer la unión de la pareja fértil, ella debía beber un vaso de agua con dos crías de serpiente. Seguramente siguiendo una antiguo rito celta de fertilidad.