La serpiente blanca
En una leyenda china se narra la historia de la serpiente blanca que habitaba en el fondo de un río de Hangzhou junto con su hermana la serpiente verde. Ambas decidieron transformarse en unas jóvenes mujeres con el nombre de Bai Suzhen y de Xiaoquing.
Cerca de un puente se encontraron con un joven llamado Xu Xian que pronto se enamoró de Bai Suzhen. Se casaron y tuvieron un hijo llamado Xu Mengjiao que consiguió liberarlos de los ataques del espíritu de la tortuga que había conseguido encerrarlos en dos templos taoístas.